Artemisa, 10 de noviembre de 1960

Sr. Ventura Luis

La Lisa

Mi querido amor, ante nada te saludo en el nombre del Señor, deseando cuando ésta llegue a tus manos te sientas bien; yo bien, gracias a Dios.

Mi vida, recibí tu carta en Paso Real y me dices que te escribiera enseguida, pero por falta de tiempo no lo hice, pero te escribo ahora porque creo que ésta en dos días llegue a tus manos.

Mi amor, yo estaba pensando que sería bueno casarnos en La Lisa, porque así los obreros La Playa pueden venir, y a mí me conviene también porque así mi familia ni se entera de mi boda, pero en La Lisa todo cuesta. En La Lisa hay que dar todos los días 20 centavos para la comida, y después todos los gastos que se hagan, y para estar allí vamos a tener que trabajar, y esto no nos conviene. Yo estimo que si esto es así mejor nos vamos para Matanzas y nos casamos allá; yo supongo que Honoria se pone muy contenta, y los miembros de la iglesia también. Cuando hablemos en los cultos de espera hablaremos de eso.

Me preguntas si me sentiré bien contigo en la campaña; tú sabes que estando en tu compañía me siento bien dondequiera. En estos días, no sé por qué, pienso mucho en ti y te quiero más cada día. Como tú dices, que tu amor hacia mí ha ido creciendo, y yo, aunque siempre te he querido, ahora te quiero más que nunca.

Aquí está Petra y las muchachitas (Petra te saluda cariñosamente).

Sé que, si Dios quiere, vas a pasar el sábado en La Lisa; yo quisiera pasarlo también, pero sé que ahora no puedo ir.

Saluda a todos en mi nombre. Saluda a Eleobaldo, Jorge, Nery, María, Mary y a Sofía Ramazzini. También a todos los hermanos de ésa. Sin más por esta vez, recibe el fiel cariño de tu novia que te quiere con el corazón,

Lucía González de Luis

Notas: No te escribo más porque tengo que bañarme y prepararme para el avivamiento. Perdonada la letra, es que escribí en las piernas con incomodidad. Adiós mi vida... Hasta el lunes, si Dios quiere.